lunes, 2 de diciembre de 2019

¿Qué hacer en caso de incendio?


Ayer comimos con unos amigos y uno de ellos recomendó este libro. En Internet está el prólogo de Errejón y las primeras páginas.

Hojearlo me ha recordado el poema de Robert Frost (¿de qué iba a escribir si no con este apellido?):


Fire and ice

Some say the world will end in fire,
Some say in ice.
From what I’ve tasted of desire
I hold with those who favor fire.
But if it had to perish twice,
I think I know enough of hate
To say that for destruction ice
Is also great
And would suffice.


Mientras encuentro una traducción que me guste, el ejercicio es que cada cual haga su canción de hielo y fuego para la Cumbre del clima, si puede ser sin dragones. Valen declaraciones de amor y declaraciones de emergencia.


lunes, 23 de septiembre de 2019

Itinerarios (cercanos)


El 5 de septiembre se inauguró en Guadalajara la exposición «Itinerarios (cercanos). Experiencias Artísticas en Gudalajara».
En ella se recogen obras de más de 20 artistas de la ciudad que reflexionan sobre los trayectos que realizan. Es necesario mencionar la sabia coordinación de Juan Carlos Fuentes pues sin ella la exposición no habría llegado ni a idea peregrina.
Gracias al vídeo de @Angelaacg podéis haceros una idea de cómo es la exposición, pero lo que de verdad os recomiendo es verla y se acaba el 6 de octubre, así que, arreando.

martes, 4 de junio de 2019

Maratón de los Cuentos de Guadalajara 2019



En dos fines de semana tenemos el Maratón de los cuentos. El tema de este año son las brujas. Os propongo un juego: ¿Por qué no escribís un microrrelato en el que salgan brujas y nos lo mandáis?

lunes, 6 de mayo de 2019

Lorca en Nueva York


Federico García Lorca llegó a Nueva York en 1929 cuestionado por su padre ya que no era capaz de ganarse bien la vida. Además arrastraba una ruptura y estaba triste, muy triste; deprimido diríamos ahora. En la imagen lo fotografiaron junto al reloj de sol que había en mitad del campus de la Universidad de Columbia, en el corazón de Nueva York. No parece un reloj de sol, es verdad, pero lo es. La esfera es una pieza de granito verde oscuro (pórfido en los pies de foto de la época) de dieciséis toneladas que, dependiendo de la sombra que diera, marcaba la hora. Todo lo relacionado con la esfera está muy bien explicado en esta página. El caso es que la esfera de piedra sufría mucho el invierno y amenazaba con rajarse, así que la retiraron por peligrosa y acabó en una finca privada tras pasar un tiempo por el Bronx.

Lorca escribió los meses que estuvo en América un libro de poemas que no se publicaría hasta 1940, cuatro años después de su muerte, y que llevaría por título Poeta en Nueva York. En el ajo estuvo el ubicuo José Bergamín, y merece la pena leer el artículo de la Wikipedia que cuenta toda la historia.

Los poemas cuentan la historia de desamor de Lorca con el mundo capitalista que él resumió así en unas declaraciones de 1933 hablando de Nueva York: “Impresionante por frío y cruel... Espectáculo de suicidas, de gentes histéricas y grupos desmayados. Espectáculo terrible, pero sin grandeza. Nadie puede darse idea de la soledad que siente allí un español, y más todavía un hombre del sur”.

En el libro Poeta en Nueva York hay un poema que se titula nada menos "Oda a Walt Whitman":



Añadidle alguna línea a la Oda hablando de cuando visitáis a diario el corazón del capitalismo.

miércoles, 24 de abril de 2019

Taller de escritura en Acippia (actualizado)


Tras los garabatos vienen otros juegos, traducciones y transformaciones en un nuevo formato de día único. Invitados estáis.

lunes, 22 de abril de 2019

Tal día como hoy, hace 403 años, murió Cervantes


Tal día como hoy, hace 403 años falleció Miguel de Cervantes. Cuando se cumplían 400 ya parecían muchos, pero esto sigue avanzando. Quijote es nuestro patrón y Sancho es el coprotagonista perfecto. De hecho, esta conjunción ha producido la entrada más visitada de este blog, seguramente porque sus conversaciones son una clara evolución de los diálogos clásicos.

Hoy me apetece recordar el diálogo que tienen Quijote y Sancho en relación con Dulcinea:


—Y en lo que toca a la carta de amores, pondrás por firma: «Vuestro hasta la muerte, el Caballero de la Triste Figura». Y hará poco al caso que vaya de mano ajena, porque, a lo que yo me sé acordar, Dulcinea no sabe escribir ni leer y en toda su vida ha visto letra mía ni carta mía, porque mis amores y los suyos han sido siempre platónicos, sin estenderse a más que a un honesto mirar. Y aun esto tan de cuando en cuando, que osaré jurar con verdad que en doce años que ha que la quiero más que a la lumbre destos ojos que han de comer la tierra, no la he visto cuatro veces, y aun podrá ser que destas cuatro veces no hubiese ella echado de ver la una que la miraba: tal es el recato y encerramiento con que sus padres, Lorenzo Corchuelo y su madre Aldonza Nogales, la han criado.

—¡Ta, ta! —dijo Sancho—. ¿Que la hija de Lorenzo Corchuelo es la señora Dulcinea del Toboso, llamada por otro nombre Aldonza Lorenzo?

—Esa es —dijo don Quijote—, y es la que merece ser señora de todo el universo.

—Bien la conozco —dijo Sancho—, y sé decir que tira tan bien una barra como el más forzudo zagal de todo el pueblo. ¡Vive el Dador, que es moza de chapa, hecha y derecha y de pelo en pecho, y que puede sacar la barba del lodo a cualquier caballero andante o por andar que la tuviere por señora! ¡Oh hideputa, qué rejo que tiene, y qué voz! Sé decir que se puso un día encima del campanario del aldea a llamar unos zagales suyos que andaban en un barbecho de su padre, y, aunque estaban de allí más de media legua, así la oyeron como si estuvieran al pie de la torre. Y lo mejor que tiene es que no es nada melindrosa, porque tiene mucho de cortesana: con todos se burla y de todo hace mueca y donaire.


El amor de Don Quijote es el amor más grande, más grande incluso que la realidad. Es el ejemplo perfecto de "amor platónico", aunque en el diálogo El banquete de Platón no se hablara de este tipo de amor o al menos no sólo. De hecho, el último en hablar en el famoso diálogo es Sócrates, que llega al amor más virtuoso, el amor a las Ideas, pero pasando antes por todos los estados del amor terrenal, con todas sus decepciones. Pero otro día hablamos más de esto.

El ejercicio de hoy es el mismo de siempre. Escribid para los comentarios lo que os dé la gana de El Quijote. Y esta semana podéis seguir leyendo frases de El Quijote, o ir al Círculo de Bellas Artes a la lectura del libro. También os podéis acercar a la estación de Metro de Plaza de España que está empapelada no con carteles electorales, sino con El Quijote o si no, podéis contemplar los grabados de Doréir al final del libro y volver a empezar.

Vale.

lunes, 8 de abril de 2019

Ha muerto Ferlosio, ¿Qué haremos ahora?




Ha muerto Ferlosio, ¿Qué haremos ahora?

Os dejo con dos textos suyos que aparecen en el libro de la imagen, bendito libro.


Vendrán más años malos
y nos harán más ciegos;
vendrán más años ciegos
y nos harán más malos.
Vendrán más años tristes
y nos harán más fríos
y nos harán más secos
y nos harán más torvos.


Ortodoxia

(Usos.) A ninguna palabra se le pide ya ningún otro orden de verdad que el que pueda pedírsele a la hora. La verdad que se pide a los relojes consiste en que cada uno de ellos diga la hora que están diciendo los demás. Cuál tiene que ser ésta, es algo arbitrariamente convenido. Pero en la misma medida en que la exigencia de verdad se ha reducido a esto, tanto más poderosa y prepotentemente se afana en exigirlo. Por eso a lo que se atiende es a la fisonomía y el aspecto externo de una frase, al aire de familia de un decir, a su valor de gesto en un determinado código de convenciones, como las caracterizaciones del vestido, por las que cada cual suele vestirse —o disfrazarse— de aquello por lo que quiere ser tomado, del tipo por el que quiere pasar, del personaje que desea representar. El que no quiere ser tomado por algo que desprecian o reprueban aquellos a quienes quiere agradar o por quienes desea ser aprobado y aceptado se guardará muy bien de decir una palabra que sea característica de aquellos por los que no desea ser tomado. Tener ideología no es tener ideas. Estas no son como las cerezas, sino que vienen sueltas, hasta el punto de que una misma persona puede juntar varias que se hallan en conflicto unas con otras. Las ideologías son, en cambio, como paquetes de ideas preestablecidos, conjuntos de tics fisionómicamente coherentes, como rasgos clasificatorios que se copertenecen en una taxonomía o tipología personal socialmente congelada. Sólo hay unos cuantos tipos de persona, y cada cual desea ser reconocido por aquellos a quienes pertenece. Esta es la única función de las ideologías; y las ideas, encerradas en paquetes tales, se ven supeditadas a ese único y tristísimo papel.

lunes, 25 de marzo de 2019

Día mundial de la Poesía


Os preguntaréis por qué pongo una foto de una tienda en la que pone "VACIADOR, CUCHILLERÍA, COPIADO DE LLAVES, REP. PARAGUAS". De todos modos, no me digáis que no es poético que una vez, en pleno capitalismo, existieran paraguas que no fueran de usar y tirar. Pero eso fue antes de que todo lo fabricaran asiáticos mal pagados.

Dentro de las actuaciones por el Día mundial de la poesía, en Guadalajara los de #ElCentroSeMueve pensaron que era buen idea escribir un poema en el cristal de este establecimiento:


Estoy de acuerdo con ellos aunque queda raro que el poema tenga tantos cuchillos detrás.
Y bueno, subo esto con retraso porque se me pasó en su día y porque todos los días es el #diadelapoesia

lunes, 4 de marzo de 2019

lunes, 25 de febrero de 2019

Amar la trama más que el desenlace



Amar la trama es una canción de Jorge Drexler. En está Ítaca personal el Uruguayo empieza diciendo:

Camino por Madrid en tu compañía
Mi mano en tu cintura copiando a tu mano en la cintura mía
A paso lento, como bostezando
Como quien besa al barrio el hilo pisando
Como quien sabe que cuenta con la tarde entera
Sin nada más que hacer que acariciar aceras
Y sin planearlo tu acaso como que sin querer lo bailo azul
Te vi cambiar tu paso hasta ponerlo en fase
En la misma fase que mi propio paso.

Ir y venir, seguir y guiar, dar y tener, entrar y salir de fase
Amar la trama más que el desenlace
Amar la trama más que el desenlace




En las aceras de Madrid, mientras los versos de Drexler se funden con la realidad y al rato se independizan, ha aparecido este de "Amar la trama más que el desenlace" gracias a Boamistura. Pero la vida no para y esta noche Drexler canta en un teatro de Madrid y vosotros podéis contar en los comentarios cómo es vuestro paseo por las aceras de la ciudad. ¿Trama? ¿desenlace? ¿amar?

viernes, 8 de febrero de 2019

No volveré a ser joven



Escuchad y dejad que se os pongan de punta todos los pelos del cuerpo.



NO VOLVERÉ A SER JOVEN

Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.

Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
-envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.

Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.


Jaime Gil de Biedma



Si queréis escuchar al propio Gil de Biedma lo tenéis aquí en TVE a la carta.


Jaime Gil de Biedma es un caso especial de escritor suicida. En realidad él no se mató físicamente, tan solo mató a su yo escritor. Justo antes de cumplir los cuarenta, en 1968, publicó Poemas póstumos -como su propio nombre indica, su último libro de poemas. Dentro de este libro está incluido el poema No volveré a ser joven.

Es verdad que una vez escribes algo así, ¿por dónde sigues? Y si encima te has convertido en un nihilistas ¿qué haces? Gil de Biedma dejó la poesía bastante de lado y publicó en 1974 Diario del artista seriamente enfermo jugando con el título de Joyce.

Escribir un buen libro es un buen objetivo, mucho mejor que el de venderlo muy bien, aunque tampoco es algo que esté mal. Pero si ya lo has escrito, ¿Entonces qué?








lunes, 21 de enero de 2019

La fiebre de Rosalía



Casi cada vez que escucho a Rosalía, y son muchas porque me encanta, me acuerdo de la otra Rosalía. Me resulta imposible no hacerlo.

En la página de la Fundación Rosalía de Castro tienen esta traducción del poema que da la letra a Amancio Prada en el vídeo de arriba:



Adiós ríos, adiós fuentes

Adiós, ríos; adiós, fuentes;
adiós, arroyos pequeños;
adiós, vista de mis ojos,
no sé cuando nos veremos.
Tierra mía, tierra mía,
tierra donde me crié,
huertecilla que tanto amo
higueruelas que planté.
Prados, ríos, arboledas,
pinares que mueve el viento,
pajarillos piadores,
casitas de mi contento.
Molino entre castaños,
noches de luz de luna
campanitas timbradoras
de la iglesia del lugar.
Zarzamoras de las zarzas
que le daba yo a mi amor
caminos de los maizales
¡adiós para siempre adiós!
¡Adiós, gloria! ¡Adiós, contento!
¡Casa donde yo nací,
dejo mi pequeño pueblo,
por un mundo que no vi!
Dejo amigos por extraños,
dejo vegas por el mar,
dejo en fin, cuanto bien quiero…
¡quién pudiera no dejar!
[…]
Adiós, adiós, que me voy,
hierbas de mi camposanto,
donde padre se enterró,
hierbas que he besado tanto
mi tierra que nos crió.
[…]
Ya se oyen lejos, muy lejos
campanas del manzanal
para mí, ¡ay! pobrecillo
nunca más me tocarán.
[…]
¡Adiós también, ay querida…
Adiós por siempre quizás!
Te digo este adiós llorando
desde la orilla del mar.
No me olvides, ay querida,
si muero de soledad…
tantas leguas mar adentro...
¡Adiós mi casa!, ¡mi hogar!


Adios

domingo, 13 de enero de 2019

Trece maneras de mirar un mirlo




La verdad es compleja. La simpleza nos engaña con facilidad, pero más bien pronto que tarde miramos detrás y descubrimos que no se sostiene.



Si te quiero contar lo que es un mirlo, puedo decirte que es un pájaro negro al que escucho cantar siempre, que más que por el cielo me lo imagino por el suelo haciendo cucús desde un arbusto.

Wallace Stevens, casi el único poeta tardío según Harold Bloom, escribió un poema llamado "Trece maneras de mirar un mirlo". Podían ser siete, trece o mil. Aquí os lo dejo con la invitación de que escribáis otras en los comentarios.



I
Entre veinte montañas de nieve,
La única cosa que se movía
Era el ojo del mirlo.


II
Yo era el de los tres sentires,
Como un árbol
Que contiene tres mirlos.


III
El mirlo giraba en los vientos de otoño.
Una parte pequeña de la comedia.


IV
Un hombre y una mujer
Son uno.
Un hombre y una mujer y un mirlo
Son uno.


V
No sé qué preferir,
La belleza de los acentos
O la belleza de las insinuaciones,
El mirlo silbando
O el instante después.

VI
El hielo ocupó la gran ventana
Con su vidrio bárbaro.
La sombra del mirlo
Lo atravesaba, una y otra vez.
El ánimo
Trazaba en la sombra
Una razón indescifrable. 

VII
Oh, pobres hombres de Haddam,
¿Por qué imaginan pájaros dorados?
¿No ven cómo el mirlo
Vaga entre los pies
De sus mujeres?


VIII
Conozco tonos ilustres
Y ritmos lúcidos, ineludibles;
Pero conozco, también,
Que el mirlo pertenece
A lo que conozco.


IX
Cuando el mirlo se apartó de la vista,
Señaló el margen
De uno de los tantos círculos.


X
Ante la imagen de los mirlos
Volando en una luz verde,
Aun las madamas de la armonía
Gritarían agudamente.

XI
Él viajaba por Connecticut
En un coche de vidrio.
Una vez, el miedo lo atravesó,
Por confundir
La sombra de su equipaje
Con los mirlos.


XII
El río se estremece.
El mirlo estará volando.


XIII
Fue de noche toda la tarde.
Nevaba,
Iba a seguir nevando.
El mirlo se posó
En el cedro, en lo más alto.

 Versión de Yanina Audisio. Aquí está el original
(Esta entrada se publicó el 13 de enero de 2019, a las 13:13, hora de Europa Central)