miércoles, 4 de mayo de 2011

Romance del prisionero

Actualmente tenemos el caso del Soldado Manning, único sospechoso de filtrar documentos del ejercito de los EUA a Wikileaks; nada menos que un soldado raso que dicen que es el culpable de todo. Lo más espeluznante son todas las medidas que están tomando para que no se suicide, que harían que a cualquiera nos entraran ganas de matarnos.
Pero podemos viajar a una primavera mucho más antigua, la de El Romance del prisionero:

Que por mayo era, por mayo,
cuando hace la calor,
cuando los trigos encañan
y están los campos en flor,
cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor,
cuando los enamorados
van a servir al amor;
sino yo, triste, cuitado,
que vivo en esta prisión;
que ni sé cuándo es de día
ni cuándo las noches son,
sino por una avecilla
que me cantaba el albor.
Matómela un ballestero;
déle Dios mal galardón.

Para pediros en el ejercicio de hoy que cada uno hable de su prisión o de la de otros, que es menos comprometido.

2 comentarios:

Jesús Rocha dijo...

Cárceles y sentires míos.
Reveses de la vida,
iras de la conciencia y la inconciencia.
¡Cárceles del aquí y el ahora!
Mi cuerpo y la vida.
Patria o muerte.
Nacimiento y muerte.

David Ruiz dijo...

ALCATRAZ

sigue llamando a la puerta
tú sigue cebando el anzuelo

he escapado de tantas prisiones
que no me importa
realmente no me importa
si me cogen vivo

tengo escondidos bajo la piel
sueños como ganzúas
palabras que no significan nada
si no se les prende fuego



sigue imaginando un pasado
de bailes en las cunetas
bajo una luna que nunca
nunca compartimos en enero



coloca cuidadosamente tus cepos
hártalos con sonrisas
no voy a morder
soy un soldado, a día de hoy
soy un soldado

sin dios ni patria ni bandera
llamado a filas
en un ejército enfurecido
dispuesto a arrasar cualquier
futuro



que aún sigues presa
de tus miedos y tu vida
quieres que compartamos celda
pero para mí alcatraz
ya es simplemente

un paraíso de puertas
y ventanas