domingo, 30 de marzo de 2008

Diarios

El Diario de Ana Frank es el ejemplo más socorrido cuando se habla de este formato literario. Veamos un par de anotaciones:

Viernes 16 de junio de 1944
Querida Kitty:

La señora Van Daan está desesperada, y habla de cárcel, de ahorcarse, de suicidio y de meterse una bala en el cráneo. Está celosa porque Peter se confía a mí y no a ella. Se siente humillada porque Dussel no responde suficientemente a sus insinuaciones. Teme que su marido se fume todo el dinero de su abrigo de pieles. Se pasa el tiempo en querellas, insultos, lloriqueos, quejas y risas para volver a las querellas.
¿Qué hacer de una chiflada que gimotea sin cesar? Nadie la toma en serio. No tiene ningún carácter, se queja de todo el mundo, provoca la insolencia de Peter, la irritación del señor Van Daan fastidiado, y el cinismo de mamá. Es una situación lamentable. Sólo resta una cosa por hacer; considerarse a sí mismo con sentido del humor y no reparar en los demás. Parecerá egoísmo, pero es en realidad el único medio de defensa cuando uno no puede confiar sino en sí mismo.
Kraler ha sido convocado nuevamente para trabajar la tierra duramente cuatro semanas.
Va a tratar de librarse mediante un certificado médico y una carta del negocio. Koophuis está decidido a hacerse operar su úlcera. Ayer, a las once, fueron cortadas las líneas telefónicas
particulares.

Tuya,
ANA


Viernes 23 de junio de 1944
Querida Kitty.

Nada especial que señalar. Los ingleses han iniciado la gran ofensiva sobre Cherburgo. ¡Pim y Van Daan están seguros de nuestra liberación para antes del 10 de octubre! Los rusos toman
parte en las operaciones; ayer comenzaron la ofensiva sobre Witebsk, exactamente tres años después del ataque alemán. Ya casi no nos quedan patatas; en lo futuro, las contaremos para que cada uno sepa la parte que le corresponde.

Tuya,
ANA

Ahora recuerdo otro diario trágico, El oficio de vivir de Cesare Pavese que escribió esto en la anotación del 18 de agosto de 1950 poco antes de suicidarse despechado:

Todo esto da asco.
No palabras. Un gesto. No escribiré más.


El ejercicio de hoy es precisamente lo contrario de lo que dice Pavese: poner la fecha arriba y escribir debajo un diario ya sea personal o simplemente imaginado. Y bueno, si abandonado/a por tu amante llamas a tres jóvenes más y las tres te dan calabazas, no te suicides como hizo él y escribe sobre ello; es más saludable y ya conocerás más gente.

Por cierto que la siguiente edición presencial del curso es el día 12 de abril en la Biblioteca de Guadalajara a la hora de costumbre (11h).


9 comentarios:

Toño dijo...

30 de marzo de 2008

El nivel del agua baja todos los días. Ayer, no sé por qué, en el lugar donde lo mido, el agua retrocedió dos palmos. Viene ya abril y esperemos que lluvioso, pero no sé qué me da más miedo, si que llueva o que no llueva; porque si llueve harán otro trasvase, aunque sea de lodo. María ya no quiere venir por aquí. Dice que le da pena y ya no pasamos casi fines de semana juntos. Y yo, no sé que va a ser de mí, porque todavía no he aprendido a marcharme.

Anónimo dijo...

Maria Jose 30-03-2008

Querida Idea:

Tienes razón, es un buen día para comenzar un diario dirigido a tí; hoy cumplo 35 años.
Las circunstancias de este año han sido distintas por caer en fin de semana.Me encantan los cumples que empiezan el viernes y terminan el lunes por la tarde. Encantadores. Agotadores.
No es de extrañar que ayer por la mañana ya estuviera reventada. Y encima me quitan una hora. Pero no importó la falta de sueño, ni el exceso de comida y bebida, ni el pecado del tabaco, ni las risas escandalosas, ni siquiera el desorden de vasos. Jamás volveré a cumplir 35 años, y con solo un año para disfrutarlos plenamente tenía que empezar pronto.
No sé si sabré. (ó podré)

David Ruiz dijo...

DÓNDE ESTARÁS. DIARIO DE UN POBRE TONTO.

Hay historias que por más que te las cuenten
no te las llegas a creer
como la de aquella rubia jodídamente guapa
con la que seguramente era pecado solo cruzar palabra
su novio opositaba para funcionario de prisiones
mientras ella sobrevolaba la vida a ras de suelo
y los viernes a la salida del trabajo
bebía con el estómago vacío hasta cambiar de piel
convirtiéndose en una devoradora de almas
que amanecía junto a la tapia de algún cementerio
con los pechos húmedos de whisky
y los dos hombres más felices del mundo a su lado
cualquier día de cualquier mes
le robó un beso a un pobre idiota
que podía haber reventado de placer la noche
gracias al altruismo de aquella rubia de buen corazón
y acabó solo conduciendo hacia la mañana
porque el muy imbécil no era capaz de convivir
con la mentira
aunque ella en un momento puntual
soñó con él y con un enorme amigo imaginario
seguramente a día de hoy no recuerde su rostro
mientras él, que nunca fue buen partido, solo en su coche
se preguntará dónde está ella
a cuántos compañeros les habrá abierto las puertas del cielo
con cuántos habrá corrido colina abajo
si es que aún conserva el buen hábito de ungir con sexo
la cabeza de los hombres sin pretensiones sentimentales
o si por el contrario
se habrá casado con un funcionario de prisiones
habiendo dejado huérfano de sueños al género masculino
y habiendo perdido el jodídamente o el guapa
Hay historias que por más que te las cuenten
no te las llegas a creer

Anónimo dijo...

MARTÉS 8 DE ABRIL DE 2008.

Hoy me he levantado como casi todas las mañanas de mi vida, somnoliento y cansado.
Hubiera deseado que tuviera lo que tengo entre las piernas mas duro que un canto, pero el estrés, el trabajo, la hipoteca, no me dejan que la sangre circule por donde debiera de ir .
He ido a tomarme el café donde siempre, al Walter. El camarero me cuenta milongas y mentiras, yo hago como que pongo interés y me las creo. Lo más interesante es cuando llegan las muchachas de la escuela de magisterio a tomarse el café, por lo menos veo carne fresca.
El día transcurre como siempre, “sin novedad en el frente, mi coronel “.
Llama mi cuñada, se le ha muerto el abuelo con 100 años. Quien llegara a esa edad, con la cabeza en condiciones, como fue este caso. Me acerco al tanatorio, doy el pésame a la familia del difunto. Digo unas cuantas gilipolleces de las mías al que me quiere escuchar, me despido, vuelvo a mi casa, miro el correo de Internet. También sin novedad. Me ceno un bocata de jamón ibérico de Aracena, Me tomo mis pastillas para el azúcar y el colesterol, me lavo los dientes y utilizo el colutorio. Hago mis ejercicios para mantener fuertes lo músculos de las cervicales, pongo el despertador, apago la luz, rezo de carrerilla. Me quedo dormido.
Mañana será un día parecido.
BERAGAOMEANO.

Anónimo dijo...

DIARIO DE VIDA

Cuando nací,a mi madre le propusieron darme en adopción, bajo el motivo ineludible de que yo era la quinta hija. Ella, inexplicablemente, no aceptó.
Esto me sirvió para valorarme en mi justa medida.
Un nacimiento atropellado. Los médicos me desencajaron el hombro, no sé si por una mala maniobra de ellos o porque yo empecé pronto con mis prisas.
Mi calle era gris, pero podíamos jugar a la goma enganchándola en los parachoques de los coches.
Crecí entre tanto descontrol que no me daba cuenta de que crecía.Cuando fui consciente de ello, lamenté tanto desorden.
Dejé de jugar al escondite cuando comprendí que nadie me buscaría.El contrapunto positivo es lo fácil que me resultaba perderme.

Mariajosé

Anónimo dijo...

Adiós


En costa lejana
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.
Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.
Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».
Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.
No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.
Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...
Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!

Gabriela Mistral

Anónimo dijo...

Un día cualquiera..

Hoy he abierto el ojo antes de que suene la alarma del móvil.
Silencio y oscuridad, nada de sueño.
Me estiro en la cama y espero a que el móvil suene, mientras tanto hago listas con las cosas pendientes. En la lista del trabajo están los correos a enviar, las llamadas por realizar, los documentos sin revisar; En la lista personal apunto las compras sin hacer, las lavadoras por poner y las cenas a organizar.
Despues de diez minutos he conseguido organizar mi vida.
En dos horas las he olvidado.
Ya despues de comer con la mirada pérdida en la pantalla del ordenador pienso que lo mejor será hacer una lista de las cosas que realmente me gustaría hacer, pero concluyo que no, que para eso no necesito listas, ni mentales, ni literales.
A las seis una amiga me propone tomar algo y decido que todo puede esperar..., hasta mañana, e incluso hasta pasado mañana.
Inicio, Apagar Equipo, Apagar. Me voy.

María

Anónimo dijo...

Mariajose


Cerraste los ojos,
no dijiste adiós.
Mochila en la puerta,
delante, los dos.
Amago de abrazo,
pero no llegó.
Un beso en la puerta,
el abrazo, no.
"No te dés la vuelta".
"Vuélvete, por favor".
Dos vidas pensando:
¿Y ahora, qué hago yo?.

Toño dijo...

Desde ayer no me puedo quitar de la cabeza a Manel. Recuerdo que hace años se incorporó a este taller, cuando lo hacíamos a través del correo electrónico como amigo de una amiga. Después nos conocimos y, por resumirlo de algún modo, nos hicimos amigos. Ayer Manel murió sin previo aviso y yo no puedo dejar de pensar en lo injusta que es la muerte y quizá la vida. No sé si lo enterrarán, pero da lo mismo. Allí estaremos todos en su Sitges con lo que quede de él, que desgraciadamente, sólo seremos nosotros.